En una manifestación pacífica en Calchaquí, un grupo de docentes encabezado por Walter Fernández expresó su rechazo al trato recibido por parte del gobernador. Exigieron respeto y mejoras en las condiciones salariales y edilicias, además de denunciar la persecución política a los trabajadores del Estado. Los manifestantes reafirmaron su disposición a negociar y luchar por mejores condiciones laborales.
“Nos maltratan a través de los medios, nos tratan de delincuentes… pero somos docentes, no delincuentes”.
Durante el arribo del gobernador Maximiliano Pullaro en Calchaquí, un grupo de docentes, liderados por Walter Fernández, se congregó pacíficamente para manifestar su descontento con el trato que, según ellos, reciben por parte del gobernador a través de redes y medios de comunicación, donde se les ha calificado de “delincuentes”. Fernández destacó que los docentes no son enemigos del gobierno, sino trabajadores con necesidades económicas y laborales, que buscan mejoras salariales y mejores condiciones en las escuelas donde enseñan.
Los docentes exigieron un cambio en la actitud del gobernador y un espacio de diálogo, en lugar de confrontación. Criticaron la demonización de los gremios en los medios, aclarando que los sindicatos representan a la comunidad docente y no solo a sus líderes. Fernández hizo un llamado a sus colegas a sumarse a la lucha, subrayando la importancia de negociar como comunidad y evitar la precarización laboral. Los manifestantes decidieron dispersarse tras la llegada del gobernador, dejando claro su mensaje: “No somos delincuentes, somos docentes”.